(A. Anglada sculptor)
PRETEXTO
Como un puberto
con la excusa exigua,
siempre te escribo
para sentirte cerca de mi.
Con algún pretexto mis manos atañen
este verso sobre el papel:
la clara luz de los otoños
saben que deseo tu voz.
Las lineas verticales de los rascacielos
se disipan en las alturas
como tú,
efímera en el firmamento de mi verso.
Este volcán latente que fue nuestro,
toda la fantasia del mundo
en el amor primavera de tu boca.
El blanco despertar de los inviernos
me semeja tu alma;
cupidos perdidos pasan sin detenerse
como revelación de mis ansías.
y se vuelven azules los arboles
de tanto esperarte,
azul oscuro de la noche
y las mañanas con sabor a desvelo.
En la comisura de mis labios
el rastro invisible de tu boca
como la huella de un caracol sobre la piedra,
se escurre minúscula.
Pero no importa;
será otro día mi alma,
sin tí,
Amor, te llaman mis labios,
te nombran, para decirte :
¡Te amo!
Autor: Hilario Esteban Lopez©
Siempre hay un pretexto para dibujar latidos en la piel y en el corazón que ama…
ResponderBorrarPrecioso poema, querido Hilario.
Un abrazo, y feliz finde.
Un pretexto es el oxígeno que se aspira para sonreír un día más y llegar a la noche con sabor a amor, primavera y añoranza en las venas.
ResponderBorrarUn bellos pretexto, amigo mío.
Mil besitos que le abracen y muy feliz día.
Y en ese te amo todo se culmina
ResponderBorrarNo hace falta más
Un abrazo